Colón resucitó en Avellaneda

A los 4.30 de juego el “Bichi” Fuertes abrió rompió el cero. El delantero aprovechó un tremendo error del mediocampista Mayorga, que dio un pase atrás en busca de algún defensor, pero no había nadie, por lo que su pase fue una perfecta habilitación para Fuertes que en el mano a mano no perdonó. 

Enseguida respondió Racing con un remate desde fuera del área (una constante en el local) que fue desviado por Pozo. 

A los 11’ esta vez el regalo vino de la defensa Sabalera, que en un tiro libre “tiró” mal el off side y dejó a varios jugadores locales habilitados, de cara al gol y mano a mano con Pozo. La pelota le cayó a Aveldaño que cabeceó sólo y el arquero de Colón volvió a responder de gran manera. 

Tras esa jugada, y con una contra bien manejada por Higuaín, Quiroga apareció por la izquierda y quedó de frente a De Olivera, aunque no definió bien y el guardavallas local desvió el disparo. 

Tras el gol, los dirigidos por Mohamed se metieron más atrás y buscaron aprovechar los espacios con velocidad y de contragolpe, aunque Racing atacaba peligrosamente y jugaba cerca del área rojinegra. 

En ese ida y vuelta, el que llegaba era el conjunto dueño de casa: a los 22’ Bieler remató desde el borde del área y apareció justo el pie de Garcé para mandar al córner. Y desde el tiro de esquina llegó un centro que Yacob cabeceó con absoluta comodidad, apareciendo nuevamente en acción Pozo para quedarse con la pelota. 

Con el correr de los minutos la Academia acorralaba cada vez más a Colón, y cerca estuvo de alcanzar la igualdad a los 26’ con tres situaciones consecutivas: primero Castromán sacó un buen tiro desde fuera del área que Pozo tapó, en el rebote Lugüercio remató de frente al arco y Pozo volvió a tapar en forma notable, dando un rebote que tomó Bieler y, por tercera vez, el arquero Sabalero ya clara figura del partido contuvo el disparo. 

Antes de la media hora, y luego de mucho tiempo, Colón volvió a tener una chance de gol otra vez con Fuertes y tras un tiro de esquina, aunque la pelota le quedó muy alta, con un ángulo muy cerrado y en una posición incómoda. 

Hasta que llegó lo que parecía inevitable: el gol del empate. Yacob remató desde fuera del área, Pozo tapó y Bieler, de frente al arco y con el arquero desparramado en el piso, tomó el rebote y definió al primer palo para conseguir un 1 a 1 que era totalmente merecido. 

Sin embargo, el que se iría al descanso en ventaja sería el equipo santafesino. De acuerdo al trámite del juego, no era justo, pero el segundo gol rojinegro fue una acción notable, un contragolpe de manual, una acción colectiva brillante que comenzó con Garcé corriendo desde su área hasta el mediocampo, tocó la pelota para Higuaín que, ubicado como “10”, habilitó con un pase profundo y a la derecha a Larrivey, que entró como un wing y definió “picando” la pelota ante la salida de De Olivera. Un golazo. 

Ya en tiempo de descuento, apareció Pozo dos veces más. Primero le sacó un cabezazo increíble a Lugüercio y, enseguida, desvió un remate de Fernández para sostener el 2 a 1 parcial. 

Pudo golear 

En el complemento comenzó mucho mejor parado Colón, que con Higuaín moviendose muy bien en el medio, tocando, distribuyendo y triangulando con Quiroga, Quilez, Moreno, Ramírez y los delanteros, jugaban cerca del área rival. Así llegó la primera situación de gol en la etapa, cuando a los 9’ Moreno quedó de frente al arco y por la derecha del área, aunque fue bien presionado por un defensor y el arquero, que mandó la pelota al córner. 

A los 17’ el que lo tuvo fue Larrivey, que recibió con absoluta soledad dentro del área, pero no terminó de acomodarse y sacó un remate débil.

Colón ya no dejaba atacar a Racing como en el primer tiempo. Había una muy buena recuperación en el centro de la cancha, manejaba correctamente los tiempos y aprovechaba bien los espacios. 

A los 22’ Racing estuvo cerca de alcanzar la igualdad con una jugada desafortunada de Garcé, quien quiso despejar y le salió un tiro “bombeado” al arco cuando Pozo estaba adelantado. Afortunadamente el arquero se recuperó y sacó la pelota sobre la línea. 

Cuatro minutos después no fue una “carambola” la que puso en riesgo la valla sabalera, sino que fue un cabezazo de Yacob que salió pegado al palo derecho de Pozo tras un tiro libre. 

Con el correr de los minutos el dominio de Racing iba en aumento y atacaba cada vez con mayor peligrosidad. Pero también el rojinegro tenía más espacios. Así, sobre la media hora Díaz tuvo una inmejorable oportunidad para colocar el tercer tanto: escapó por la banda derecha y dentro del área hizo varios amagues pero nunca remató al arco. 

A los 39’, otra vez Damián Díaz apareció solo en el área, esta vez por la izquierda para definir desde un ángulo cerrado, tiro que De Olivera desvió por el fondo de la cancha. A los 42’ una formidable habilitación de Higuaín dejó a Ramírez de frente al arquero de la Academia, aunque este último achicó muy bien y evitó la caída de su valla. Un minuto después fue el propio “Pipita” el que armó una jugada para él y disparó desde fuera del área, aunque no llevó más peligro. 

Ya en tiempo de descuento, el Sabalero volvió a desperdiciar una clarísima situación de gol con más hombres en ataque, más espacios y un rival totalmente desarmado en defensa. 

Mientras Racing iba ya casi sin fuerzas, Colón se fortalecía, solventado por las actuaciones de Pozo, la gran figura, pero bien acompañado por las tareas de Garcé, Moreno y Fabianesi e Higuaín, tres que mostraron en Avellaneda un alto rendimiento, aunque en general el equipo jugó muy bien, como hace mucho no se veía, lo que permitió acabar con una extensa racha de partidos sin ganar.