El Ejecutivo entrerriano puso en marcha un área destinada a la faena de conejos en la Unidad Penal Nº 1 de Paraná, mientras que en la cárcel de mujeres llevó adelante una sala de corte y confección para la elaboración de uniformes. “Es una inversión que se hace en equipamiento”, sostuvo el ministro de Gobierno, Adán Bahl. Igualmente, señaló que el objetivo es la reinserción de los interno: “Buscamos alternativas para que cuando sus condenas terminen, estén en una formación superior a la que han entrado”, realzó.La visita comenzó en la Unidad Penal Femenina Nº 6, en la cual se inauguró una sala de corte y confección donde las internas realizan indumentaria para la institución como así también para particulares a través de convenios. Al respecto, Bahl expresó que “se trata de un sector donde se produce indumentaria textil para personal interno”. También se celebraron convenios para proveer de indumentaria a otras áreas del Estado.
La recorrida continuó en la cárcel para varones, donde se transitaron los galpones en que se realizan distintas actividades. “Hemos logrado un área muy importante de producción de mobiliario escolar”, informó el ministro. Y acotó: “Tiene una capacidad de producción de aproximadamente 250 unidades por mes, una excelente calidad y fundamentalmente con un costo muy bajo”.
Finalmente, argumentó que con esta iniciativa, “la persona no solamente está alojada en una celda, sino que tiene la posibilidad de formarse y serle útil a la sociedad”. Según dijo, “el fin es que cuando egrese tenga una herramienta que le permita reinsertarse rápidamente en la sociedad, con un oficio que le posibilite trabajar”.
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